Xhunca…
Déjame
Déjame darte un beso, transpirar tu esencia, posarme en tu centro y postrarme ante tu belleza sublime.
Deja que tus ojos sean mi guía, ante la ceguera de esta sociedad sorprendida, mientras conduces mi aliento al agua de tu vida.
Déjame ser tu alma gemela, para beberme el último café de la noche y apagar la televisión mientras te arrullo en mis brazos.
Déjame caminar contigo, apretándote los dedos, mientras nuestros pasos toman el ritmo que la sombra de la única nube nos cobija en este desierto.
Déjame amarte, istmeña, que tu amor me hace vivir.
Por una eternidad juntos
Sabes
para encontrarte me guíe por las estrellas
aprovechando la ausencia de los cometas
vengo del Sol
pasé antes por la Luna
allí deje el anillo robado a Saturno
para después adornar tus manos que me acarician
cual caminante de la Vía Láctea
pinté en el universo un oráculo que describía un rito para Afrodita.
Y dejé los otros mundos para buscarte
en la eternidad de nuestros sueños
y entregarme al fuego que nos da vida
para entonces
solo dejé ir el alma y perdí la conciencia
sin religión
solo pude rendirle culto a tu belleza
y me entregué a ti
y fui de ti
por los siglos del infinito
en un cosmos donde solo el creador fue testigo
vengo del Sol
aprovechando la ausencia de los cometas
me guíe por las estrellas
para encontrarte.
Tomada de www.artesmexico.com