top of page

Hay dos efectos negativos que puede ocasionar la remoción de material en lecho del cauce de un río:

 

  • Se estará disminuyendo el estrato que sirve de protección al acuífero ante posibles fuentes superficiales de contaminación, lo que incrementa su vulnerabilidad. La arena es como la esponja de los ríos, pues disminuye su aceleración y permite que el agua fluya al subsuelo.

 

  • Que el nivel del nuevo lecho sea inferior al que pueda alcanzar el nivel freático. Esto hace que el agua subterránea se pierda. En esta situación, el acuífero pierde capacidad de almacenamiento de agua subterránea al drenar hacia el cauce un volumen de agua que pasa a ser escurrimiento superficial, con lo que se pierde del almacenamiento subterráneo. Y sin agua en el subsuelo toda la actividad humana y agrícola se ve gravemente afectada.

 

La extracción de arenas de ríos en forma excesiva causa la degradación de los lechos. La extracción rebaja el lecho del río, lo que puede resultar en la erosión de las riberas o bancos. La extracción en los lechos y áreas costeras causa la profundización de ríos y estuarios y el agrandamiento de las entradas costeras, lo que puede llevar a que el mar se meta al río y ocasione no solo la muerte de los peces y plantas, sino una salinización del agua subterránea y al extraerlo del mismo suelo.

 

La extracción excesiva de arenas de lechos fluviales es una amenaza para los puentes, riberas, paredones y casas aledañas al cauce del río. La extracción también afecta el agua subterránea y el uso que le dan al río los habitantes de Ixhuatán y los pueblos alrededor de la cuenca del Ostuta.

 

La extracción de arenas en lechos fluviales causa la destrucción de hábitat acuático y a través de cambios marcados en la morfología del río. Los impactos son los siguientes: degradación del lecho, cambios en el tamaño de las piedras y el tamaño de caudal del agua e inestabilidad del lecho. ¿Ahora se explica por qué ya casi no tenemos paredones?

 

La extracción de arena en el cauce, o cerca del cauce, modifica la corriente y puede resultar en cambios marcados en la hidráulica del canal. Estas intervenciones pueden tener efectos variables en el hábitat acuático, dependiendo de la magnitud y frecuencia de la extracción, los métodos de extracción, el tamaño de las arenas y las características de la vegetación alrededor del río, o llamado bosque de galería.

 

La extracción de arenas de cauces aluviales puede tener otros efectos más allá del sitio de extracción. Muchas hectáreas de áreas fértiles adyacentes al cauce se pierden anualmente, así como recursos forestales. Hábitats degradados llevan a una pérdida de la población de peces. Los factores que aumentan o disminuyen la oferta de sedimentos usualmente destabilizan el cauce y los bancos, lo que resulta en reajustes dramáticos en la morfología del cauce. Por ejemplo, las actividades humanas que aceleran la erosión de los bancos, tales como el talado de bosques de galería o la extracción de arenas en los cauces, facilitan que los bancos se conviertan en fuente de sedimentos, con consecuencias negativas severas para las especies acuáticas. Las actividades humanas que conllevan una disminución del nivel del lecho causan inestabilidades que resultan en la producción de sedimentos en zonas vecinas. Los sedimentos inestables simplifican, y luego degradan, los hábitats del cauce para muchas especies. Solamente pocas especies se benefician con este efecto. Por eso ya no se ven tantos peces que antaño observamos y pescamos.

 

Los efectos más importantes de la extracción de arenas en los hábitats acuáticos son la degradación y sedimentación del cauce, los cuales pueden tener efectos negativos marcados en la vida acuática. Por tanto, el solicitar que se drague el río resuelve el efecto, pero no la causa. Es como pretender curar con aspirinas el cáncer.

 

La estabilidad de cauces de lecho arenoso y gravoso depende de un balance delicado entre el escurrimiento, el sedimento que llega de la parte norte del Ostuta y la forma del cauce. Los cambios provocados por la extracción se contraponen con los procesos naturales de desarrollo del cauce y hábitats. Además, la movilización de los paredones causa su inestabilidad y resulta en sedimentación de aguas abajo. De ahí que quien sufra las consecuencias sea la boca del río.

 

La remoción completa de vegetación y la destrucción de los paredones ocasiona que el suelo que se va, destruye el hábitat tanto arriba como debajo del terreno y también el ecosistema acuático, lo que resulta en la disminución de poblaciones de fauna.

 

El ensanchamiento del cauce disminuye la profundidad del canal, produce un sistema de flujo trenzado inestable o flujo de subsuperficie en la gravas, lo que dificulta el movimiento de peces. Los cauces son más uniformes en profundidad debido al relleno de las partes profundas con grava y otros sedimentos, lo cual reduce la complejidad del hábitat. En pocas palabras, al no haber pozas, ya no hay diversidad de peces.

 

La extracción de arenas convierte los lechos fluviales en fosos grandes y anchos; como resultado, afecta negativamente en el manto freático, y con ello a los pozos de agua, no deja agua para la sobrevivencia de las plantas y árboles y, si se está cerca del océano, la salinización de los suelos al extraer agua contaminada por sales. La explotación de arenas en cauces tendrá un impacto en la calidad de agua del río. Algunos de los impactos incluyen el incremento en la turbidez debido a la suspensión de lodo.

 

La extracción en gran escala de materiales llega a causar:

 

▪ El colapso de los paredones

▪ La pérdida de terrenos cercanos a los paredones

▪ Erosión aguas arriba debido a aumentos en la pendiente del río

▪ Erosión aguas abajo debido a una mayor capacidad de transporte de sedimentos de la corriente

 

La extracción que lleva a la remoción de la arena lleva a la eliminación de vegetación, y el almacenamiento de materiales en el cauce tendrá impactos ecológicos. Estos impactos podrán tener efecto en la pérdida directa de hábitat en el cauce, el disturbio de especies que habitan los depósitos, reducción en la penetración de luz y una reducción de oportunidades de alimentación para las especies del sitio. Eso incluye al humano.

 

Sin agua de calidad, sin peces, sin árboles y sin vida, pues como que el futuro no es muy halagador para el pueblo. Y la autoridad pensando en el dragado en lugar de eliminar las causas: habla de cuando menos ignorancia o lo que usted le ponga.

Los efectos negativos de extraer arena del lecho del Ostuta

Joselito Luna Aquino

bottom of page