Falta el primer eslabón:
¿quién putas madres envió a los muchachos a la boca del lobo?
Dice Mahler: con este clima, con tal tormenta,
¿quién echó fuera a los niños? (Kindertotenlieder)
¿Y quién aviva las llamas golpistas?
Luis González de Alba
El río Ostuta nace en Los Chimalapas y es una suerte que tenga corrientes perennes, en contrasentido de los ríos de su tipo que nacen en selvas bajas y medias caducifolias. Y digo contrasentido, que a no ser por los efectos de los vientos alisios que llegan como frentes fríos, descargando lluvias del lado de barlovento (zona húmeda) y corre por el corte continental hacia la zona de Sotavento (zona seca).
El río Ostuta ha sido históricamente base del sustento de los diferentes pueblos que se han establecido en sus márgenes y áreas de influencia. En efecto, vestigios históricos pueden observarse en terrenos aledaños a su cause que aún no han sido cabalmente estudiados.
Para quienes no lo saben, basta revisar el Google Maps para ver que la cuenca del Ostuta abarca los municipios de Tapanatepec, Zanatepec, Niltepec, Chimalapas, Reforma de Pineda, San Francisco del Mar e Ixhuatán. La subcuenca donde se ubica el río Ostuta nace en la Sierra Atravesada a 1400 msnm, drena 1319 km2 del distrito Juchitán, presenta direcciones con rumbo suroeste hasta desembocar en la Laguna Inferior. Recibe por margen izquierdo al río Zanatepec, ese se transforma en río Tamarindo, al Novillero y por la izquierda al Guamol, incluye en su cauce diferentes arroyos como el de las Arenas.
Es considerado la principal arteria y pulmón ecológico de la zona oriente, la Conagua cataloga al Ostuta como un río sano (muy a nuestra desidia) y fertiliza con sus inundaciones de limo y arcilla los campos en las partes bajas de su cauce. Da el agua dulce y los nutrientes a la laguna inferior, la albufera que corre desde Tiniongo hasta Pie del Cerro y con ello beneficia al sistema de manglares del mar muerto. La abundante pesca que alguna vez tuvimos se debe en gran medida al Ostuta, puesto que regula la salinidad de las lagunas, que sin el serían páramos de sal que no permitirían el desarrollo de pesca económicamente atractiva.
Históricamente ha sido la base de subsistencia y suministro de agua para los asentamientos humanos que han basado su subsistencia y desarrollo por su impacto en la economía y la sociedad a través de la agricultura, la pesca, la caza. Es importante destacar que, aun con el deterioro que presenta, el río Ostuta continúa siendo la única corriente pluvial que relativamente se encuentra libre de contaminación en todo el Istmo de Tehuantepec, en particular del distrito de Juchitán; sin embargo, la deforestación, las prácticas agrícolas y ganaderas intensivas, el uso de pesticidas, fungicidas, insecticidas, la sobrexplotación de grava y arena, la destrucción del hábitat, la caza y pesca intensivas, la ignorancia y avaricia de algunos están contribuyendo notablemente a su deterioro creciente.
El Ostuta nace en las montañas de Los Chimalapas y es de destacar el interesante e importante fenómeno que se observa después de que concluyen los periodos regulares de lluvias. Los pobladores de Zanatepec, Ostuta, Huanacastal, Reforma de Pineda, San Francisco Ixhuatán, San Francisco del Mar Pueblo Nuevo y Viejo, ubicados río abajo, saben que el caudal de este se incrementará notablemente cuando se presenten fuertes vientos. Así que, sin lluvia visible dos días después, el nivel del agua sube, trayendo efectos importantes para la pesca, la agricultura, la ganadería y la propia sobrevivencia del río. El fenómeno tiene su explicación por los frentes fríos que se originan regularmente en el Canadá, los que forman corrientes de chorro y provocan precipitaciones importantes en las montañas de Los Chimalapas y vientos asociados (nortes) que se manifiestan en las poblaciones mencionadas. Este fenómeno permite que el río aumente su caudal, arrastre contaminante, provoque que la fauna rivereña se proteja y abunde, nutra los manglares, alimente de agua al mar muerto, entre otros importantes efectos.
Y sumo: estas crecientes permiten mantener un flujo de corrientes que corre por las lagunas y permiten, con ello, incrementar el nivel de las lagunas y la movilidad de especies como el camarón, que, desde tiempos ancestrales, los pescadores han sabido aprovechar para la captura de esta especie. De ahí deviene el arte de pesca de la rastra y las "tapas", esos pequeños canales que terminan en embudo que hacen encajonar al camarón y facilitar su captura.
Y el Ostuta con estas crecientes de agua sin lluvias aparentes permitieron el incremento de los niveles friáticos y, con ello, el invento de un sistema agrícola llamado chuahuites, ese que permitió tener una doble cosecha aprovechando los terrenos bajos y anegables para cultivar en periodo de estiaje. Tantas bondades trajo el río Ostuta que, cuando hago el recuento, no entiendo nuestro desprecio hacia él.
Durante mucho tiempo, las partes altas del Ostuta, donde no forma un cauce, sino dos, ya que ese río como tal se junta 2 kilómetros antes de la localidad del mismo nombre, de acuerdo con los mapas con escala 1:50000 del Inegi en sus ediciones anteriores al 90 y las actualizaciones posteriores al 2000, marcan una creciente deforestación de sus márgenes, llegando a las partes bajas que corren de Huanacastal hasta la boca del río donde desemboca en delta, la desaparición de su bosque de ladera, que permitió mantener no solo una cubierta vegetal que contuvo la erosión y contar con paredones altos, ha desaparecido y los riesgos de inundaciones mayores se ha incrementado. Años de monocultivos y deforestación de su cuenca han incrementado su asolvamiento y, por consiguiente, disminución de la pendiente que permite el desfogue de su cauce y, por tanto, evitar su deterioro.
Por tanto, la causa no reside en quitar el azolve a la boca del río, eso resuelve el efecto @ghenestroza @maria_matus. Ahí no está la respuesta a el deterioro de la subcuenca, como la respuesta que le dieron a un niño de 14 años cuando les cuestionó del tema en Twitter (@manuellunapined). Hace falta mantener la superficie arbórea de los altos del Ostuta, o sea, en Chimalapas, recuperar el bosque de ladera en la zona baja, tener zonas de amortiguamiento vegetal para que las toneladas de suelo no se erosionen de un suelo carente de selva llenen el cauce ahora, con la nueva moda llamada mango, que terminará en fracaso como lo fueron la sandia y el melón en el pasado reciente, o la ganadería antes de ello.
Implica organizarnos todos los municipios que nos beneficiamos de las aguas y riquezas del Ostuta porque la tarea es más grande de lo que puede ser el quitar maderas y lodos de la desembocadura del río. Y no, #Wicho, tampoco la solución está en poner bordos más altos, ahí no está la respuesta al problema de las inundaciones, al contrario: da una falsa idea de seguridad. Espero y lo entiendas, como entendías a la perfección los álbumes de PolyMarch, esos que recuerdo fueron tus libros de estudiante.
También incluye prohibir el saqueo de arena y piedra del río porque debilitan a los ya debilitados paredones y modifican las corrientes en las inundaciones, lo que ejerce presión a ellos y manda el agua a inundar al pueblo. Hace falta sacar el compromiso que cada trienio los presidentes municipales adquieren con el explotador de la arena a cambio de dinero a sus campañas electorales, lo que hace pagar con sus irresponsabilidades y corrupción la paguemos todos los ixhuatecos.
Actualmente, puede observarse que los mantos acuíferos tienden a contaminarse. La contaminación ha ido en aumento y se corre el riesgo de contribuir en el corto plazo a destruir la principal base del desarrollo sustentable de los municipios que beneficia el Ostuta. O sea, nuestras miasmas ya han contaminado el agua que bebemos. Espero y no se les ocurra ponerle drenaje, sería la puntilla para el Ostuta. Mis ixhuatecos tienen cerca un río contaminado, el de Los Perros, en Juchitán, y sabrán el resultado que no espera.
Propuesta: integrar un grupo de trabajo incluyente y con capacidad de proponer en los tres niveles de gobierno y la participación de grupos de campesinos, ejidatarios, agricultores, centros de investigación, instituciones de educación superior, grupos ambientalistas, la imperiosa y urgente necesidad de realizar los estudios que en una primer etapa muestren el diagnóstico integral de la situación que guarda del río y el impacto de las actividades productivas y humana que están conllevando a la destrucción de la base del desarrollo sustentable de la zona oriente.
En un segundo momento, hacer un plan de remediación y conservación del río con propuestas de orden legal, económico, social, cultural, ecológico, etcétera, y ponerlo en práctica. Las acciones deberán abarcar a todos los sectores, desde los niveles de gobierno, económicos, sociales y sociedad civil organizada.
Ringlera:
De entrada, ya interpuse ante la Conagua una denuncia a los saqueadores de arena y grava del río Ostuta para poner mi granito de arena a la solución del problema.
Falta denunciar a los desgraciados que tiran pesticidas al río porque es lo más criminal que se le puede hacer a un pueblo y a un río generoso.
Pante:
Corre la nota por parte de Luis González de Alba que la causa de la desaparición de los 43 alumnos de #Ayotzinapa tuvo que ver con el robo de un cargamento de opio que iba de Iguala a Reynosa. Grave la cosa.